Una buena madre es la célula principal de una sociedad, pues se ha comprobado que su ejemplo al resto de los integrantes impacta directamente en la calidad, conducción y valores de una sociedad.
Hay una relación biológica amorosa que existe entre los hijos; desde el útero, la que empieza a transmitirle al hijo, a través del DNA fisiológico, la percepción de sensibilidad y de necesidad de amar, como parte fundamental del proceso de existir. Por esa razón es muy importante; porque nos educa desde la placenta a practicar el arte de amar. Hay algunos rasgos comunes que definen a una buena madre, a continuación te sumamos más de estas características;
- Actitud de contentamiento: Viene de hacer siempre lo correcto, de prepararse para ser una mujer de verdad, plena y feliz en su entorno con su marido, en su vida personal, familiar, con sus hijos. No afecta el ambiente del hogar. Enfócate en lo que si tienes y no en lo que te hace falta. No dejes que los hijos se quejen.
- Tiene un agudo sentido de discernimiento: Los hijos se preguntan ¿Cómo sabes esto o lo otro?…no es engañada fácilmente, investiga, indaga para poder salvarlos de sus errores.
- Pone orden en el caos: No es fácil, siempre trabaja, es decir, hace todas sus funciones que tiene que hacer, tiene el don de las multitareas porque tienes demasiado potencial. Está en pro de la diligencia y resistencia al a pereza, mantiene su hogar libe del desorden, no porque haga todo, sino porque pone a sus hijos a que colaboren en todo. Procura un hogar sano que esté lleno de amor, alegría, no solamente físicamente, sino también espiritualmente y emocionalmente.
- Cultiva un ambiente alegre: Mantiene la presencia y la práctica del amor, hay buena convivencia entre los miembros cualquiera que sea la situación económica por la que estén pasando. Se percibe un buen ambiente de la cual todos los miembros son responsables, pero una madre tiene mucha más injerencia en esto.
- Demostrar amor: Una buena madre no tiene miedo de mostrar amor a sus hijos, usa siempre este recurso aún cuando tengas que disciplinarlos. El amor estimula la confianza en tus hijos, nunca te desanimes por la conducta de tus hijos, corrige lo que debas corregir en ellos y continúa hacía el triunfo como mujer y mamá.
Somos Paulino y Ana Ruisanchez directores de Universidad de Vida, te mandamos un saludo afectuoso y te invitamos a lo siguiente:
- Reflexionar sobre el tema
- Identificar los puntos en los que has cometido errores
- Aplicar las recomendaciones
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Estamos para servirte, recuerda que siempre puedes profundizar más, pues la preparación continua y el esfuerzo son parte de las características de HOMBRES Y MUJER TRIUNFADORES. No estás sol@ en este camino de formación hacía el triunfo, tenemos a tu disposición las herramientas necesarias para que logres transformarte, renovarte y obtengas excelentes resultados.